IPPDH en apertura del Congreso sobre Jurisdicción Universal en el Siglo XXI

09 de septiembre de 2015

Congreso Jurisdicción Universal en el siglo XXI. Buenos Aires, Argentina.

Juristas y activistas de derechos humanos se reúnen en Buenos Aires para debatir y consensuar un documento sobre los delitos de lesa humanidad. La cita se inició hoy 9 y se extiende hasta mañana 10 de Septiembre en Buenos Aires en el marco del Congreso Internacional de Jurisdicción Universal organizado por la Fundación Internacional Baltasar Garzón y apoyado por el Instituto de Políticas Públicas en Derechos Humanos del MERCOSUR, entre otras diversas organizaciones e instituciones.

Con el marco del Teatro Cervantes lleno, se dió inicio al encuentro con la presencia de Alejandra Gils Carbó, Procuradora General de Argentina, Remo Carlotto Presidente de la comisión de Derechos Humanos del Congreso argentino, Martín Fresneda Secretario de Derechos Humanos de Argentina, Baltazar Garzón exjuez de la Audiencia Nacional española y Presidente de FIBGAR institución organizadora del evento, y Paulo Abrão Secretario Ejecutivo del IPPDH.

Paulo Abrão señaló que la realización de este evento es muy oportuno porque vemos una coyuntura con retrocesos, estamos en medio de una crisis humanitaria con el tema de los refugiados, «son crisis graves que representan para nosotros indicios de retrocesos en las conquistas civilizatorias de los derechos humanos» «debemos avanzar y la doctrina de jurisdicción universal es una de esas grandes oportunidades de avanzar en medio de esta crisis». También señaló, «la historia de la barbarie fue escrita sobre las víctimas, sobre el sufrimiento de los más frágiles. Si queremos construir la historia de otra manera debemos revisar el pasado, y como así incomoda la memoria, la jurisdicción universal también incomoda, porque ella crea las condiciones para la no repetición de la barbarie».

Baltasar Garzón, se refirió a los nuevos paradigmas en torno a los principios de jurisdicción universal y la vigencia de los crímenes de lesa humanidad, «Estamos hablando de víctimas universales, de los propios derechos de la naturaleza, de mecanismos con los que se puede contribuir a que esos ataques atroces sean cada vez menores» destacó.

Acto seguido se iniciaron los paneles temáticos con destacadas figuras, la lucha contra la impunidad, medio ambiente e intereses económicos, el cibercrimen y la defensa de los derechos humanos de América Latina son algunos de los temas a ser abordados. El congreso reunirá a personalidades como la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, la ganadora guatemalteca del Premio Nobel de la Paz Rigoberta Menchú, al fundador de Wikileaks, Julian Assange, Raúl Zaffaroni juez de la Corte Interamericada de Derechos Humanos, entre otros.

Como han destacado los organizadores, este congreso es un punto culminante de un trabajo intenso que se inició en mayo de 2014 de un grupo de expertos que se reunió en Madrid con el objetivo de actualizar los Principios de Princeton de 2001. «El resultado de ese trabajo fue un documento que, con el nombre de Propuesta de Madrid para la discusión de los principios sobre la Jurisdicción Universal, un texto de un carácter eminentemente progresista, y cuya intención fue la de dar un paso más en la reafirmación del consenso ya existente, la codificación nuevos elementos y la proposición de nuevos mecanismos para la lucha contra la impunidad»

Este evento organizado por la Fundación Internacional Baltasar Garzón (FIBGAR), pretende «actualizar y vigorizar este principio de vital importancia para la defensa de estos derechos fundamentales a nivel global: la Jurisdicción Universal. El objetivo es consensuar un documento en el que se fijen las bases del principio de Jurisdicción Universal y, en consecuencia, las líneas a seguir, durante las próximas décadas, en la persecución y juzgamiento de crímenes de Lesa Humanidad; en la defensa de víctimas y testigos; en la coordinación entre los distintos organismos nacionales e internacionales vinculados con este principio y en la definición de nuevos delitos, como los medioambientales o económicos»