20 de noviembre de 2023
El 20 de noviembre de 1954 la Asamblea de las Naciones Unidas proclamó esta fecha como el Día Mundial del Niño y la Niña. En la misma fecha, se proclamó la Declaración Universal de los Derechos del Niño (1959) y se aprobó la Convención de los Derechos del Niño (1989), esta última, considerada la más universal de las convenciones, establece una serie de derechos para las infancias, incluidos los relativos a la vida, la salud y la educación, el derecho a jugar, a la vida familiar, a la protección frente a la violencia y la discriminación, y a que se escuchen sus opiniones.
La pobreza, el cambio climático, la educación y la salud mental, el desplazamiento forzado, el racismo y el impacto particular de la pandemia de COVID19 en las infancias son algunos de los temas que más afectan a su generación. UNICEF informó en un documento referido a las infancias de América Latina y el Caribe que 8 millones de migrantes en la región son menores de 18 años, 2.1 millones son afectados por desastres medioambientales cada año, 30% de niños y niñas con discapacidad no asisten a la escuela, 46,2% de niños y niñas de 0-14 años viven en situación de pobreza, entre otros datos. Nuestras infancias viven en la región más desigual del mundo.
En este marco, es un imperativo la acción de los Estados para el cumplimiento con la Convención de los Derechos del Niño, y garantizar así el desarrollo y goce de una vida plena en derechos. La convención, entre los derechos que promueve, está el referido a la participación de las infancias, entendiendo que la participación no solo es un derecho, sino también un principio general para la realización de todos los demás derechos, un componente necesario para garantizar la “autonomía progresiva, la protección, el interés superior del niño” y todos los otros derechos consagrados en la Convención. La participación efectiva de las infancias en la creación de las políticas públicas orientadas a la promoción de sus derechos, es garantía del impacto positivo de las mismas.
MERCOSUR, como bloque regional, ha trabajado en la protección de derechos de niñas, niños y adolescentes como tema prioritario. En el año 2005, en la I Reunión de Altas Autoridades sobre Derechos Humanos del MERCOSUR (RAADH) se aprobó la Iniciativa Niñ@Sur como cuyo objetivo es articular los esfuerzos nacionales y promover acuerdos regionales orientados al cumplimiento de los instrumentos internacionales de derechos humanos universales y regionales como piso mínimo de derechos humanos de niños, niñas y adolescentes. La participación de las infancias y adolescencias en la Comisión Permanente Iniciativa Niñ@Sur ha sido clave para interpelar a los Estados del MERCOSUR.
La participación de infancias y adolescencias en el MERCOSUR tiene un hito en 2020, cuando se conforma la RedSurca (Red Sur de Crianças e Adolescentes), como una red de organizaciones de niños, niñas y adolescentes (NNA) de los países parte y asociados del MERCOSUR, integrada por representantes de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Perú, Paraguay y Uruguay. La red fue propuesta en la Comisión Permanente Niñ@Sur de la RAADH en el año 2018.
Por otra parte, los niños, niñas y adolescentes también han sido protagonistas de 2 Consultas Públicas del Foro de Participación Social del IPPDH. En 2017, se realizó la VI Consulta Pública – Políticas Públicas Regionales para Niñas, Niños y Adolescentes, en Asunción, Paraguay. En 2022 se realizó la XI Consulta Pública – Derecho de Niñas, Niños y Adolescentes a Vivir en Familia y Alternativas de Cuidado: hacia la construcción de estándares regionales.
El contexto de la post pandemia y su impacto en las infancias del MERCOSUR exige al bloque regional acelerar la articulación política y la construcción de consensos para coordinar acciones y políticas públicas para la promoción y protección de los derechos de las infancias, todo esto teniendo como eje la participación activa de las mismas a través de procesos permanentes, intercambios de información y diálogo entre las infancias y agentes públicos y autoridades sobre la base del respeto mutuo.
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